Aunque a muchos de nosotros no nos gusten demasiado, los finales son la última oportunidad que tenemos de ganar (o de no perder) una partida. Hay cientos de finales teóricos, algunos realmente complejos, otros apenas se dan en la práctica y, otros, en cambio, son prácticamente fundamentales.
[pull_quote_center]Con el fin de mejorar tu juego, debes de estudiar los finales antes que todo, ya que mientras que los finales pueden ser estudiados y dominados por sí mismos, el medio juego y la apertura deben de ser estudiados en relación con los finales. (J. R. Capablanca)[/pull_quote_center]
En este artículo quiero compartir contigo algunos consejos súper útiles, muy relacionados con lo que siempre suelen preguntarme mis alumnos:
¿Qué pautas debería seguir en los finales de alfiles del mismo color?
Si los finales son de alfiles del mismo color, es mejor que no dejes tus peones bloqueados en casillas del mismo color que tu alfil salvo que hayas encontrado una muy buena razón (que podría ser, por ejemplo, que tu alfil quede por fuera de una estructura de peones bloqueada). En estos finales la movilidad de tu alfil es fundamental, ya que será uno de los factores posicionales que compararás contra tu rival. Es decir, si cuentas con un mejor alfil y el resto de los factores son iguales (actividad del rey, peones débiles, peones pasados etc…) seguramente te encuentres en una posición con mejores perspectivas que tu oponente.
¿Qué técnicas tienes que conocer respecto a este tipo de finales? Pues bien, lo primero es que manejes y comprendas la intercepción de la diagonal (o intercepción en la diagonal). Se trata de utilizar de forma coordinada la acción del alfil y el rey para avanzar y coronar nuestro peón, evitando que el alfil rival se entrometa en nuestros planes.
He grabado un vídeo para que aprendas exactamente en qué consiste esta técnica. ¡Te recomiendo fervientemente que lo veas!
Observa la siguiente posición, el blanco no puede coronar porque le comen la dama, y el final de alfil y rey contra rey es tablas.
Veamos un ejemplo de la misma técnica algo más difícil. ¿Sabes cuál es el plan ganador?
Y por último, un ejemplo desde el punto de vista defensivo.
Como ya sabes, para poder ganar es necesario ejecutar la técnica de la intercepción de la diagonal. Esta técnica siempre se realiza con el apoyo del rey y utilizando una casilla clave que es aquella en la que vamos a interponer nuestro alfil ante la acción del alfil rival. Si lo que queremos es defendernos, nuestra estrategia consiste en hacer lo mismo que nuestro rival, es decir, tratar de controlar la casilla de intercepción para evitar que el alfil ofensivo rival se oponga a la acción de nuestro alfil defensivo. La siguiente partida es un muy buen ejemplo: