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El “Tigre de Acero”, Tigran Petrosian, el mejor defensor de la historia

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Petrosian estratega
Mejor estratega de la historia

Tigran Vartanovich Petrosian fue el 9° campeón de ajedrez del mundo. 

Se coronó en 1963, arrebatándole la corona al longevo Mikhail Botvinnik, el patriarca del ajedrez ruso. 

Petrosian es famoso por su juego abstracto y de profunda visión posicional. Apasionado de la armonía en ajedrez admiraba profundamente a Capablanca y Aaron Nimzowitsch de quien, desde niño, atesoraba un volumen de “La práctica de mi sistema” (la “secuela” del famoso e influyente libro “Mi sistema”, donde a través de 109 partidas se ilustran los principios de la estrategia en ajedrez).

Libro de cabecera de Petrosian.

Justamente de Nimzowitsch aprendió lo que sería su característica más definitoria, la “profilaxis” . 

Su comprensión extremadamente lógica del ajedrez (de hecho, escribió su disertación doctoral en filosofía sobre el tema) lo llevó a ser reconocido como el defensor más virtuoso y fuerte que haya existido en ajedrez. A tal punto que cada derrota era considerada una verdadera hazaña. 

Petrosian nació el 17 de junio de 1929. Este mes, a casi 100 años de su natalicio, quiero dedicarle una breve pero sentida semblanza a este genio del ajedrez, que no siempre ha recibido el reconocimiento que merece. 

Vida y primero años de Petrosian 

Tigran Petrosian nació en la ciudad de Tiflis (en ese tiempo llamada Tbilisi), Georgia, que formaba parte de la extinta Unión Soviética. 

Sin embargo, era armenio de origen, como el gran maestro Levon Aronian, y en Armenia es considerado como uno de sus hijos predilectos y más destacados. 

Petrosian nació en una familia de trabajadores, de hecho su padre era analfabeto y en su etapa inicial esperaba que su hijo se dedicara a otras actividades. Según recuerda, llegó a decirle “Estudia, porque con el ajedrez no te ganarás el pan”. 

Quedó huérfano a una edad temprana, tras perder a sus padres en la Segunda Guerra Mundial.

Sin embargo, esto no lo detuvo en su progreso en el ajedrez y a los 16 años ya era un jugador altamente cualificado. 

En 1945 ganó el Campeonato de Georgia, en 1946 se trasladó a Armenia donde quedó en el primer lugar del Campeonato de Armenia. En 1947 y 1948 compartió el primer lugar de ese mismo campeonato con el muy fuerte jugador Genrikh Gasparyan. En 1951 consiguió conquistar el Campeonato de Moscú. 

Petrosian alzado en hombros
Petrosian alzado tras ganar victoria

Su primer contacto con el ajedrez lo tuvo en el Palacio de Pioneros de Tbilisi, donde le enseñaron a jugar y donde conoció a Archil Silovanovich Ebralidze, su primer maestro y una figura de importante influencia en su desarrollo, quien además tenía una gran sensibilidad por el juego posicional en ajedrez que le transmitió a sus estudiantes.

De estos primeros años se conservan algunas partidas. Desde el inicio demostró haber asimilado los principios del ajedrez.

Conquista del Campeonato

Para el año 1953 Petrosian consigue el título de Gran Maestro tras una década de gran despliegue ajedrecístico. 

Sin embargo, el desarrollo de su potencial requirió de mucho trabajo duro para el “Tigre de Acero”, de hecho, señala que por su estilo de juego (ya en esa época eminentemente posicional) recibió tal cantidad de «advertencias críticas» que le hicieron pensar en abandonar el ajedrez.

Una conversación con un periodista, Ashot Arzumanian, le dio un impulso renovado. 

Arzumanian quería conversar con Petrosian para escribir un libro sobre las conexiones ruso-armenias. El futuro noveno campeón mundial aprovechó el espacio para comentarle sobre sus dudas y preocupaciones, a lo que el periodista le respondió: “No debes ni soñar con abandonar el ajedrez. Debes jugar y triunfar. Solo así demostrarás tu razón”. 

Su razón llegaría en 1963 cuando finalmente conquistó el Olimpo del ajedrez al vencer a Botvínnik (de 52 años) quien había perdido y recuperado su título en varias ocasiones.

Petrosian campeón
Petrosian campeón

Es un match muy disputado, jugado a 22 partidas y que se realizó entre marzo y mayo. El resultado final fue de 12.5 para Petrosian contra 9.5 para Botvinnik. Fue la última vez que el patriarca disputó el título de campeonato. Una curiosidad adicional, de las 22 partidas disputadas, 15 fueron Gambitos de Dama y no hubo ni una sola apertura con el peón de rey, lo que ilustra el carácter profundamente posicional del encuentro. 

Según comenta el propio Petrosian, el apoyo de sus compatriotas armenios fue una pieza fundamental para darle la fuerza moral suficiente para imponerse en ese disputado match. 

Sin embargo, más allá del ánimo recibido de parte de los armenios, lo que marcó su triunfo definitivo fue la victoria del virtuosismo de su estilo, que se basaba en una comprensión profunda de los “factores posicionales de largo plazo”.

En palabras de Garry Kasparov: “Es como si tuviese un sexto sentido para percibir cómo y cuándo podría llegar a su fin la iniciativa del rival, mientras que las lagunas de la posición contraria permanecerían”.

Petrosian defendería con éxito su título en 1966 contra Borís Spassky, en un torneo muy disputado que acabó con 12.5 para el “Tigre de Acero” contra 11.5. Y que tuvo partidas magistrales como la siguiente.

Finalmente perdería el título en 1969 contra el propio Spassky. Esta vez cayendo 12.5 contra 10.5. 

Estilo de juego de Petrosian

Petrosian se puede pensar como el radical opuesto de Mikhail Tal, el mago combinatorio, y con quien compartió interesantes duelos. 

El noveno campeón del mundo era un jugador eminentemente posicional, que se destacaba por su excelente técnica defensiva. 

En términos de apertura solía abrir con d4, sintiéndose muy a gusto con el Gambito de Dama y principalmente en las variantes (con blancas) de la India de Rey. Con blancas también solía jugar la apertura inglesa. 

Con negras en cambio, era un jugador asiduo de la Defensa Francesa aunque también solía jugar Defensa Sicilianas y la Caro-Khan.

Esto lo llevó a perder muy pocas partidas, de las casi 2000 que se encuentran en la base de datos Chess Games, apenas tiene 157 derrotas.

También es cierto que tiene un alto índice de tablas, sin embargo, una de las bellezas de su juego es que son brillantes no por el resultado final sino por las posiciones armónicas e incluso los complejos sacrificios que realiza para obtener ventajas posicionales de largo plazo. 

Principales aportes 

El “Tigre de Acero” le dio al ajedrez una gran cantidad de aportes. Sin embargo, creo que los más importantes (destacados por biógrafos y analistas de su juego) son principalmente dos: su estilo profiláctico y el sacrificio posicional de calidad. 

La profilaxis es, como muchos sabemos, un concepto desarrollado inicialmente por Nimzowitsch. En  su libro,“Mi Sistema”, abogaba por la “sobreprotección” de las casillas débiles y de las casillas importantes estratégicamente hablando. Es decir, abogaba por ideas defensivas para prevenir los posibles ataques del rival. 

Aprende a defenderte en ajedrez

Sin embargo, es Petrosian el que desarrolla con maestría este concepto siendo capaz, como comentó Fischer, de “detectar y alejar el peligro veinte jugadas antes de que éste surgiera”. La siguiente partidas es un ejemplo: 

El sacrificio posicional de calidad es una idea incluso más compleja que la de profilaxis. Lo normal es que el sacrificio de calidad (es decir, la entrega de una torre por una pieza menor) se realiza para ganar fuerza dinámica, es decir, opciones de ataques concretas en una posición (Alekhine y Tal son dos de sus mayores exponentes).

Sin embargo, los sacrificios de Petrosian parecía que se hacían a cambio de “nada”, sin opciones de ataque evidentes a corto plazo, porque lo que buscaban era asentar debilidades del oponente destruyendo la armonía de su posición, y explotando factores a largo plazo. 

Esto se puede ver en la siguiente partida (Spoiler alert: Atentos a la jugada 14. … Txe5), en la que Petrosian demuestra que su torre y alfil eran más fuertes que las dos torres del fortísimo jugador danés Larsen

Finalmente, este genio del juego posicional y estratégico muere en agosto de 1984 en Moscú, a los 55 años, debido a un cáncer de estómago. Pero dejan un duradero legado estratégico que aun tiene potencial para ser explotado y aprendido

3 COMENTARIOS

  1. Muy interesante la historia del Maestro Petrosian. Digna de ser estudiada y asimilada. Personalmente me gusta mucho. Gracias por este artículo.

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