Boris Spassky nació en Moscú (Rusia) en 1940. Su padre era militar y su madre era bailarina y sufría depresión. Empezó a estudiar ajedrez a los siete años, al principio con su padre y otras personas en el parque local. Fue a los 11 años cuando empezó a jugar en varios torneos, en ocasiones venciendo a adultos con mucha solvencia.
Llegó a ganar distintos títulos nacionales como miembro del equipo nacional de la Unión Soviética hasta 1967, cuando perdió su última partida contra Anatoly Karpov, que ganó el campeonato del mundo.
Por si todo lo anterior fuera poco, Boris Spassky fue campeón del mundo de ajedrez desde 1969 hasta 1972 y fue el primer jugador en ganar tres Torneos de Candidatos consecutivos. Posee el récord de partidas de ajedrez disputadas: ¡más de 1.000!
Boris Spassky, la perfección técnica
En definitiva, fue uno de los jugadores más fuertes de la historia, a pesar de que obtuvo su primer gran título internacional a los 20 años, cuando terminó por delante del futuro Campeón del Mundo Tigran Petrosian en el torneo internacional de Hastings de 1959.
La forma de jugar de Spassky se caracterizaba por la perfección técnica y los golpes rápidos y creativos. Su estilo, junto con su microevaluación de cada jugada y su deseo de jugar al borde mismo de la legalidad, le valieron el apodo de “la Máquina”.
Y como ejemplo de esta capacidad creativa queremos compartir contigo una desconocida partida disputada en la Budensliga alemana. En la que vas a encontrar uno de los golpes más sorprendentes, espectaculares y devastadores de la vida ajedrecística de Spassky. Especialmente importantes son las jugadas previas, llenas de sutilezas y de ingenio para alcanzar el climax definitivo de la posición con un sacrificio inesperado.
No te pierdas el final…